Escenario 1: Una tarde tu hijo te comenta que realizará su tarea de matemáticas; minutos más tarde lo encuentras llorando o malhumorado. Además notas su tarea incompleta y con varios errores ¿te ha pasado?
Escenario 2: En la mañana, antes de ir al colegio observas que tu hijo se encuentra apresurado y preocupado. Cuando le preguntas si está bien te responde “hoy tengo examen de matemática” y lo entiendes todo. ¿Te has preguntado qué papel juegan las emociones en su desempeño?
En este blog te contaremos cómo las emociones están relacionadas a un bajo desempeño en matemáticas (adelanto: no tiene NADA que ver con su inteligencia).
Los investigadores de un estudio en la Primaria, publicado en la revista Learning and Individual Differences (2020) encontraron que la motivación influye de manera significativa en el aprendizaje de matemáticas mientras que las emociones negativas están relacionadas un bajo rendimiento. Entonces ¿qué va primero: frustración o malas notas?
Cuando un estudiante se siente frustrado, puede tener dificultades para concentrarse en sus estudios, lo que puede resultar en un menor rendimiento en las pruebas y tareas escolares.
Además, la frustración puede llevar a sentimientos de desesperanza y falta de motivación, lo que afecta su actitud y compromiso hacia sus estudios. En última instancia, esto puede llevar a un círculo vicioso en el que la frustración genera malas notas, lo que a su vez aumenta la falta de motivación.
Es importante que los estudiantes aprendan a manejar la frustración y a desarrollar estrategias para mantenerse motivados y enfocados en sus objetivos académicos.
¿Cuáles son estas estrategias?
Establecer metas
Metas a corto o largo plazo permitirán que tu hijo observe su progreso y no mida su rendimiento según una nota sino su avance.
Celebrar el progreso
Reconocer lo que ha conseguido tu hijo no sólo le brindará satisfacción sino lo impulsará a hacerlo de nuevo.
Resaltar la importancia del aprendizaje
Si tu hijo no sabe cómo las matemáticas son importantes fuera del salón de clase, pregúntale sus sueños e hazle ver cómo los números se relacionan con ellos.
Identificar su método de estudio y aprendizaje
Tu hijo prefiere lugares abiertos para estudiar ¿o lo distrae? Al memorizar ¿le ayuda más leer el texto o recitarlo?
¡Pide ayuda!
Si ya has llevado a cabo estas estrategias y no ha funcionado, ¡pide ayuda! Reconocer que tu hijo necesita ayuda fuera del colegio no sólo permitirá que mejore su desempeño escolar sino que con la ayuda correcta ¡despierte su pasión por aprender! Existen diversos recursos digitales, físicos, presenciales o virtuales; aquí te dejamos nuestra guía para padres de 3 ESTRATEGIAS PARA TRIUNFAR EN MATEMÁTICAS
Por lo tanto, al crear un entorno de aprendizaje positivo y atractivo, promover una mentalidad de crecimiento y fomentar la motivación intrínseca, puedes ayudar a tu hijo a desarrollar un amor por el aprendizaje y lograr el éxito académico sin que se convierta en una lucha constante.
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